23. Melahel (Dios que
liberas de los males)
Nombre Sagrado: Mem-Lamed-He-Aleph-Lamed.
Por su vinculación
sefirótica con la Esfera de Binah donde expresa las cualidades de Hod-Mercurio, extrae la
condición que le permite ser portador de la esencia llamada Capacidad Curadora, que ha de
aportar al individuo la virtud de saber discernir entre las distintas hierbas
medicinales las que sirven para curar las más diversas enfermedades.
Las aportaciones del Ángel Melahel,
son las siguientes:
- Protege contra
las armas de fuego y los atentados.
- Propicia las
curaciones mediante plantas medicinales.
- Fecundidad en
los campos, propicia la lluvia.
- Osadía para
emprender operaciones arriesgadas.
- Protege contra
contagios, infecciones y enfermedades.
Si analizamos las
características de los Centros que intervienen en la Fuerza Angélica llamada Melahel,
comprenderemos las cualidades que le han sido asignadas.

La Morada de Binah le sitúa,
a nivel Macrocósmico, en la Esfera del
Pensamiento Abstracto, ejerciendo su hegemonía, a nivel Microcósmico, sobre la
Región del Pensamiento Concreto, siendo esta “región”, la antesala del Mundo
Material. Podemos decir, que el Mundo Físico es la energía mental hecha “carne”.
Binah-Inteligencia, inscribe
el Conocimiento Divino en las Leyes de la Naturaleza. Cada parte de esta
naturaleza lleva inscrita la capacidad de aportar la condición Divina de la
Unidad. Gracias a Binah, logramos comprender la dinámica cósmica y extraer las
verdades ocultas en los pliegues de todo lo creado.
Por otro lado, Hod-Mercurio,
que representa el Centro del Entendimiento y la Lógica. Si Binah-Saturno
representa el Pensamiento Abstracto y Arquetipal, Hod-Mercurio, representa el
Pensamiento Concreto. Ambos Séfiras colaboran estrechamente, propiciando la
Comprensión de las Leyes Divinas. Hod, nos lleva a estudiar, analizar,
escudriñar, el mundo que nos rodea y a extraer conclusiones concretas de sus
investigaciones, lo que le permitirá aplicarlas a sus necesidades físicas.
Cuando Hod realiza su labor,
da lugar a lo que se conoce como la “fuerza de la razón”; el estudio, el
discernimiento, nos lleva al encuentro con la verdad y, entonces, decidimos
aplicar esa verdad en nuestras vidas.
Gracias a Hod, nuestra mente
está capacitada para saber elegir entre el Bien y el Mal. Ahora bien, si
nuestro Hod-Mercurio, no realiza su labor adecuadamente, nuestra mente dará
cobijo al error y alimentaremos falsas creencias que nos llevará a participar
de ese error. No sabremos, entonces, discernir el bien del mal.
¿Capacidad Curadora?
En efecto, la conjunción de
fuerzas de Binah y Hod, motivará a nuestra mente para que se oriente en el
estudio de las propiedades que encierra la naturaleza. Esa confluencia de fuerzas,
dotará a nuestra intelecto de una capacidad innata para descubrir las cualidades
que poseen los atributos de la Tierra.
No en vano, Binah es el
Aspecto Creador de la Divinidad. Gracias a Jehová, el Supremo Arquitecto de
nuestro Universo, el Mundo es portador de sus Leyes.
Melahel, adquiere la
Capacidad Curadora, extrayéndola de las cualidades y propiedades de la que es
portadora la propia naturaleza.
Cuando en nuestra naturaleza
interna albergamos el deseo de curar, estamos permitiendo que la Divinidad nos
responda, poniendo a nuestro alcance las capacidades que nos permitirán
reconocer ese poder curador en las fuerzas de la naturaleza.
Ya hemos dicho, que la
Unidad se manifiesta a través de la Inteligencia Divina. Igualmente, hemos
referido, que Binah es el artífice de la Creación del Mundo que conocemos.
Cuando en nuestro interior, se une el deseo de curar, con la creencia de que la
Unidad forma parte de Todo lo Creado, se produce la condición necesaria para
que nuestra mente comprenda y reconozca esa Unidad en la propia naturaleza.
Tenemos pues a la figura del
naturópata, del curandero, del experto en el
conocimiento de los componentes curativos de las plantas.
Realmente, la capacidad
curativa de Melahel, se manifiesta cuando internamente, nuestra mente deja de
identificarse con la creencia de la división, de la separación. Cuando somos
capaces de ver la Unidad que envuelve a todo lo creado, cuando nos sentimos
parte del Todo, entonces estamos en condiciones de “conocer” esos lazos de
unidad en la propia naturaleza.
Hod-Mercurio, nos mantiene
prisionero de falsas creencias, fabricadas por el ego, mientras que nos
identifiquemos con el mundo físico. Será de la mano del mismo Hod, que se
producirá el “despertar” de la conciencia, llevándonos a reconocernos como
Hijos de Dios.
¡Qué la Luz sea contigo!
Si deseas comunicarte con Melahel,
te dejo un enlace donde comparto la Plegaria y Exhorto elaborada, de una manera
inspirada, por Kabaleb.
Planetas - Sephirots
ResponderEliminar1.- Keter - Plutón
2.- Jokmá - Urano
3.- Binah - Neptuno
4.- Jesed - Jupiter
5.- Gevurá - Marte
6.- Tiferet - Sol
7.- Netsaj - Venus
8.- Hod - Mercurio
Principio Equilibrador Hod/Mercurio::
Mis sentimientos dicen la verdad. Yo comprendo las tareas de mi vida.
9.- Yesod - Luna
10.- Malkut - Tierra
11.- Daath - Saturno